Colleta, la chica masai - Udare

Nació el 8 de febrero de 1985, en Ngarantomi una aldea masai ubicada a 7 Km de Arusha, en el seno de familia dedicada a la ganadería el padre y a la venta de verduras la madre. Aún recuerda cómo los jueves y los sábados la madre iba al mercado de Arusha a por verduras para posteriormente venderlas en su puesto de venta en Ngarantomi.

Ella es una chica masai, pero como ella dice, una masai moderna. No vive como los masais asentados en Ngorongoro, ella, al igual que su familia conserva ciertas tradiciones masais, pero vivir en la zona de Arusha ha hecho que adquieran diferentes costumbres de otras etnias asentadas en la ciudad. Por eso ella dice que es masai, pero masai de ciudad.

Colleta en Arusha

Hasta los 11 años vivió en Ngarantomi con sus padres mientras cursaba primaria. Al finalizar los estudios de primaria fue a Namanga (Kenia) ciudad fronteriza con Tanzania, donde se alojó en casa de su tía para seguir con sus estudios. Al continuar estudiando en Kenia, como los planes de estudios eran diferentes, tuvo que repetir primaria y aprender inglés.

Colleta, muy joven en su aldea

El marido de su tía pertenecía a la etnia Akamba y ésta era la lengua que empleaban en casa, por lo que Colleta pronto aprendió, además de la lengua masai y swahili, el inglés en el colegio y el kamba en casa de su tía.

El motivo por lo que Colleta se desplazó a Kenia a estudiar fue debido a que su tía quería contribuir con los estudios de su sobrina. Los vínculos familiares son muy estrechos y la tía quiso devolver la ayuda que recibió por parte de su hermano (padre de Colleta) anteriormente, colaborando con los costes de la educación de su sobrina.

Tras finalizar primaria Colleta fue a un pueblo llamado Loitokitok, situado a 30 Km del Parque Nacional de Amboseli, donde estuvo en un colegio internado estudiando secundaria. Allí aprendería una nueva lengua el kikuyu, muy extendida en Kenia.

En 2004 tras finalizar los estudios de secundaria su familia quiso que regresara a Tanzania, para continuar su vida junto a ellos.

Colleta tras finalizar estudios en Kenia

En 2005 comenzó a trabajar como supervisora en una empresa dedicada a la venta de semillas, en un pueblo llamado Tengeru a 5 Km de Arusha.

Ella estaba contenta trabajando, pero tenía muy claro que esta actividad era temporal, pues ella siempre había querido ser guía de safaris.

En su casa no vieron con buenos ojos este interés, su familia quería que estudiase para poder ser profesora, pero Colleta lo tenía claro, le apasionan los grandes mamíferos, las aves y la naturaleza. Ella iba a a ser guía.

Colleta en el río Mara en 2014

Esta decisión supuso un distanciamiento con su familia porque el trabajo de guía se veía como un trabajo de hombres, un mundo de hombres y ella era una chica, masai.

Por este motivo ella en 2006 inició sus estudios de turismo, a la vez que compaginaba con su trabajo en Tengeru, para poder costear sus estudios, a pesar de no contar con el respaldo de los suyos.

Tras finalizar sus estudios de turismo, ella realizó durante 3 meses prácticas como guía en el PN de Manyara y a pesar de tener la posibilidad de empezar a trabajar como guía, prefirió estudiar durante 6 meses ornitología en el PN de Tarangire.

Colleta durante las prácticas en Manyara

Tras finalizar su especialización en el estudio de las aves, regresó a Arusha donde inició los estudios de español.

Compaginó sus estudios de español con trabajo como guía de trekking en Tarangire. Durante más de un año trabajó haciendo excursiones en Taranagire y lago Manyara.

Así, fue en junio de 2010 cuando le surgió la oportunidad de poder empezar a trabajar como guía de safaris. Fue en este momento cuando su sueño se vio materializado.

El haber estudiado en Kenia le permitió conocer el país y poder trabajar de guía tanto en Tanzania como en Kenia.

Colleta con Cris en Masai Mara en 2014

Finalmente en enero de 2015 se incorporó al equipo de Udare Safari, donde junto con Gregory desarrolla su labor de manager y guía, permitiéndole compaginar su pasión por su trabajo entre animales y acacias, y su vida familiar.

Su simpatía, buen humor, empatía y conocimiento ha hecho ganarse a los viajeros y viajeras y poder ser lo que siempre fue, una chica masai independiente y luchadora por sus sueños.

Ana con Colleta en 2014. Por Ana G.

Raquel y Colleta en una aldea masai en 2015. Por Raquel

No es necesario viajar a Tanzania y Kenia para conocerla, puesto que está participando, o mejor dicho protagonizando, las tertulias de Esencia Masai por diferentes ciudades españolas.

Tertulia Esencia Masai en Pamplona en 2015. Por Udare