Safari Kamba
Desde 1.710$ por persona
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Posiblemente tras varios días de safari por el norte de Tanzania, entre miles de animales, acacias y baobabs, dedicar un día al lago Natrón puede ser una jornada, cuanto menos, sorprendente.
La visita al lago Natrón en un itinerario de safari suele ser al principio o al final del mismo.
Es muy habitual que la primera jornada del viaje sea de Arusha al lago Natrón, o que pueda hacerse en la segunda jornada, tras haber visitado previamente Manyara o Tarangire.
Con la ayuda de este mapa podremos hacernos una idea.
La verdadera experiencia comienza cuando tomamos el desvío en Mto Wa Mbu (marcado en rojo) hacia lago Natrón.
Durante nuestro viaje hacia Natrón (3 horas aproximadamente), circularemos por polvorientas pistas, zonas semiáridas a nuestros ojos, donde sorprendentemente vive una gran comunidad masai.
Cruzaremos pueblos donde se observan mercados, bares, tiendas, lugares donde se congregan los masais y los lugareños, para intercambiar diferentes productos, como ganado, maíz, agua, etc.
También veremos bomas o poblados masais, menos frecuentados por viajeros y viajeras, poblados incluso que prefieren evitar las visitas.
Niños con sus rebaños de cabras o vacas cruzarán los caminos a nuestro paso.
En definitiva, podremos disfrutar de un paisaje y un entorno rural, donde podremos ver a nuestro paso la vida del pueblo masai.
Las singulares figuras envueltas en mantos rojos caminando en la distancia a nuestra vista, perdidos en la nada, no será la única imagen que atraiga nuestra atención.
A mitad de camino se alza ante nuestro ojos, la montaña sagrada de los masais.
Ol Doinyo Lengai, con 3.188m se trata del único volcán activo de Tanzania. Las diferentes erupciones ocurridas a lo largo de la historia hizo que los masais la llamaran en su lengua la Montaña de Dios, Ol Doinyo Lengai.
Este volcán ejerce una gran influencia en el entorno donde se ubica. Las erupciones durante su historia han emitido grandes cantidades de cenizas volcánicas que han nutrido las tierras próximas haciéndolas muy fértiles, ideal para el pastoreo de los masais.
Esas mismas cenizas son la causa de la elevada salinidad del lago Natrón, que han convertido a éste en un lugar inhóspito donde sólo los flamencos han sabido adaptarse, alimentándose de las algas presentes en el agua. En algunas ocasiones, en los márgenes del lago, donde la salinidad es ligeramente menor, se han visto algunos peces.
Además del impacto sobre el medio físico y natural donde se ubica, sin duda el económico es otro de los impactos positivos que genera en las comunidades locales masáis.
El ascenso al volcán suele ser una actividad que atrae a muchas personas, bien por el valor místico que tiene esta montaña para el pueblo masai, bien por ser el único volcán activo de Tanzania, bien por las magníficas vistas al Serengeti y Ngorongoro o bien, por poder ser ascendido en una única jornada.
El ascenso suele iniciarse desde el campamento del lago Natrón hacia las 01:00 de la madrugada, para alcanzar la cima a las 06:00, poder contemplar el amanecer desde el borde del cráter y regresar al campamento a las 10:00.
Sin perder de vista la gran montaña, alcanzaremos el lago Natrón.
Por tercera vez desde que tomamos el desvío en Mto wa Mbu, deberemos pagar un nuevo permiso para poder visitar la zona, dinero que irá a parar a las comunidades masais, en mayor o menor medida.
Para poder visitar el lago Natrón tendremos que solicitar (y pagar) a un guía masai que nos acompañe durante nuestra visita.
El mejor momento para la visita de este entorno es desde junio hasta octubre, momento en el que miles de flamencos se congregan para el apareamiento. No obstante, durante todo el año podremos ver flamencos, aunque el número de éstos sea menor.
Uno de los aspectos que más sorprenden a los visitantes son el color rojizo de las aguas, debido a las algas que habitan en estas aguas. Este color rojizo estará presente en el plumaje de los flamencos, en mayor o menor medida según su alimentación.
Tras un paseo por los márgenes del lago y tras sufrir los efectos del calor, debido a la ausencia de sombras y una Tª del lago de hasta 60ºC, decidimos que es momento de visitar las cascadas de agua que surgen desde diferentes manantiales y que lo convierten en un auténtico oasis.
Las cascadas y las piscinas naturales son el lugar ideal después de un paseo por el lago, para poder disfrutar de un entorno de gran belleza natural. Poderte dar un baño y contemplar los acantilados que rodean la cascada es un momento de relax, muy agradable.
Ahora bien, el camino hasta la cascada no es apta para todos los públicos, ofrece zonas de cierta dificultad de paso, habrá que cruzar el río a pie en varias ocasiones y habrá que subir por zonas de piedra y rocas.
Esta dificultad es disfrutada por muchos viajeros y viajeras, pero también puede hacer sufrir a más de uno o una.
Es importante llevar una ropa cómoda, que seguro se mojará, un calzado adecuado para andar por el río y por zona de piedra. Unas chancletas o un calzado que no sujete el pie no es lo más recomendado, tampoco hace falta una bota de montaña o trekking, pero si un calzado cerrado y cómodo.
En definitiva, una jornada muy interesante si se quiere combinar con las habituales visitas a los parques naturales.
Suele ser recomendado dedicar dos noches, puesto que el día de llegada se suele hacer una visita a un poblado masai y al día siguiente es cuando se dispone de tiempo suficiente para poder visitar el lago y las cascadas.