Safari Kamba
Desde 1.710$ por persona
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5 días de safari por Tanzania.
Alicia y su familia, han querido compartir un viaje único, un viaje lleno de experiencias y emociones, un viaje que se vive una vez, pero se revive a través de los recuerdos, infinidad de veces.
Un viaje familiar, disfrutando de paisajes, atardeceres, fauna, naturaleza y conociendo otras realidades, a través de la inmersión cultural en las zonas rurales tanzanas.
El 15 de agosto partían de Arusha, hacia Tarangire. Por su ubicación, un clásico en los safaris tanzanos.
A sólo 2 horas y media de Arusha, podemos disfrutar de una impresionante inmersión en fauna y naturaleza, donde los baobabs ejercen de meros observadores, viendo pasar ante ellos infinidad de viajeros, absortos en este maravilloso entorno.
Un primer día de safari, que nos ofrece una explosión de vida, difícil de imaginar.
Tras Tarangire, continuamos nuestro viaje, hacia un clásico, no sólo de Tanzania, sino de África en general, en cuanto a safaris se refiere, Ngorongoro.
Una parada en su mirador, nos mostrará esta caldera, única por la cantidad de fauna que alberga y por ser hogar de la mayor concentración de felinos de África y de los amenazados rinocentros.
Tras disfrutar la mañana en Ngorongoro, a la tarde cruzamos a Serengeti para dormir.
Nos esperan 2 días en la gran sabana, donde cada rincón puede ofrecernos experiencias únicas.
Nos sentimos inmersos en un documental de fauna, de los que toda la vida hemos podido ver en la 2. Pero en esta ocasión, difícil quedarse dormido…
Y a la noche, a la noche en Kubu Kubu nos espera un reparador descanso. Un alojamiento para disfrutarlo.
Y así, tras 4 intensos días de safari, hay que regresar poco a poco hacia Arusha, sin antes parar en Mto Wa Mbu, un pequeño pueblo a mitad de camino hacia Arusha.
Un día cultural, que nos descubre la forma de vida tanzana, su cara rural, sus cultivos, su mercado, su gastronomía local. Una gastronomía basada en platos de cuchara, consistentes, productos locales, que difícilmente podremos disfrutar en unos hoteles, más habituados a comidas enfocadas al turismo.
Así, con este sabor de boca, a batata, arroz, banana frita y cerveza local, despediremos este intenso viaje, de momentos únicos y recuerdos infinitos.
Muchas gracias Alicia, por vuestra confianza y por vuestra generosidad, al compartir estos momentos con nosotros.
Asante sana rafiki!